No date, no fate

Hace como 2 semanas que me deje de fijar que día era.
Ya no se si estamos a 10, 20 o 30.. de junio ó julio!!
Tampoco me cuesta trabajo distinguir entre un martes y un sábado.
Entre un jueves y un domingo.
Para mí la 1 de la mañana equivale a las 10 de la noche.
Divago, pienso, hago cosas sencillas y estoy en paz.
Hay ocaciones en las que se necesita la soledad.
No te puedo explicar por que lo necesito.
No te puedo explicar por que desvarío ni por que me ausento.
Cada persona tiene su ritmo.
Eso es lo que yo necesito para distinguir entre los días de la semana.
Entre los meses del año.
Es lo que necesito para poder vivir con ello.
Para procesar, para eventualmente crear.
Recapitular, resumir lo que pasó, escribirlo, desaprender y volver a empezar.
Aunque el saldo sea en números rojos.
No siempre me gustan los finales de las cosas, preo prefiero pasar un tiempo asimilándolo y continuar, que perder tiempo tratando de cambiarlo.
Recuerda que lo que es, es.
Ya viene el tiempo de recapitular.
No comas ansias.
Ya viene el tiempo de volver a lo que solía ser...
Claro, con las marcas que dejan otros tiempos y su efecto sobre mí.